Proyectos e ideas

En Castelraimondo, en 25 años de historia, han nacido muchas ideas que se precian de ser imitadas. Las únicas constantes en los últimos años han sido Pierpaolo Casoni y las Magnolie. El Campus ha sido y es un terreno fértil para las ideas donde, gracias a la experiencia y la creatividad de su fundador y de su equipo, siguen surgiendo proyectos nuevos y originales.

El primer objetivo es ofrecer una experiencia de vida a través del estudio de la lengua y la cultura italiana y las diversas excursiones, que sea algo increíble e inolvidable. Para lograrlo, se crearon las clases itinerantes, los eventos interculturales y las nuevas excursiones, para ofrecer siempre algo nuevo a los que regresan.

El segundo objetivo, hijo del primero, es el de acoger cada vez a más estudiantes de diferentes partes del mundo. Creemos en la interculturalidad como riqueza y por esto el director, Daniele Donati, junto con otros miembros del equipo, viajan por todo el mundo para presentar nuestros proyectos y ofrecer clases de cultura, seminarios de actualización para profesores y becas. Un punto importante para nosotros, en cuanto a la promoción del Campus, es el de establecer, tanto como sea posible, convenios directamente con las instituciones de lengua y cultura italiana con el fin de ofrecer beneficios tanto a los estudiantes como a las instituciones.

El tercer objetivo es desarrollar una comunidad, virtual y no virtual, de apasionados por la enseñanza del italiano L2/LS. Para ello nació el proyecto CampusLAB, el laboratorio de didáctica de lengua italiana del Campus Magnolie. Dentro de este proyecto hay seminarios para profesores y becas que les permiten mantenerse actualizados. La idea de la comunidad es la de cultivar la pasión junto con nuestro equipo y las instituciones que colaboran con nosotros. Las becas son nuestro agradecimiento por la confianza dada y fomentan el intercambio, otro elemento en el que creemos firmemente, para nuestro crecimiento y para hacer mejor nuestro trabajo cada vez mejor, que es el enseñar la lengua italiana, no de la mejor manera posible, sino de las mejores maneras posibles.

Nuestra escuela no tiene ningún tipo de lazos con editoriales que imponen el uso de manuales y libros de texto. Somos «libres» de trabajar con todos los materiales de didácticos del mercado y los seleccionamos de acuerdo con el Marco Común Europeo de Referencia para las lenguas (MCER). Esto se debe a que creemos en que deben ser los mismos docentes quienes deben seleccionar los temas y textos según las preferencias de los estudiantes. Este trabajo de investigación y selección es obviamente más difícil, pero nos permite ofrecer un mejor servicio y una didáctica más eficaz.

Estamos ya trabajando en más ideas y proyectos.